Recuerdo vívidamente el momento en el que recibí la noticia de que había sido galardonado con el 1er premio “José Luis Gómez Skarmenta” concedido por la SEBD. Fue una mezcla de emociones encontradas. Por un lado, sentí una enorme alegría y orgullo, pues a todos nos gusta que nuestro trabajo sea reconocido, especialmente por otros investigadores cercanos a nuestra área de trabajo. Además, también me sentí honrado y privilegiado de poder compartir dicho premio con Manuel Irimia, a quién no solo admiro y considero uno de los mejores investigadores de nuestro país, sino también un buen amigo. Dicho esto, recuerdo no poder evitar cierto sentimiento de tristeza y nostalgia, ya que la imagen de nuestro querido José Luis me vino inmediatamente a la cabeza y no pude evitar que me embargase la emoción. Conocí en persona a José Luís hace ya bastantes años, precisamente en un congreso de la SEBD que se celebró en Madrid. Corría el año 2014 y yo acababa de empezar mi grupo de investigación en la U
Manu Irimia fue galardonado con el Premio José Luis Gómez Skarmeta a la excelencia científica en Biología del Desarrollo en 2020. El premio reconoce los méritos y el liderazgo de Científico/as con menos de 7 años de trayectoria independiente. En este post, le entrevistamos con motivo del 30 aniversario de la sociedad para conocer su visión sobre el campo y sobre la SEBD. 1. Cómo nace tu interés por la biología del desarrollo Siempre encontré fascinante como un genoma es capaz de codificar las instrucciones para convertir una célula individual en un organismo complejo. Es decir, es imposible entender cómo funciona un genoma de un multicelular si no se estudia durante el desarrollo embrionario. No obstante, fue encontrarme con la EvoDevo lo que hizo que definitivamente me interesara el desarrollo. Recuerdo, de hecho, el momento: fue una charla de Antonio García-Bellido en tercero de carrera que fue un auténtico shock. Desde entonces tuve claro que el desarrollo no solo tiene la clave p